Juan 3:30
30 Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe.
Cómo Juan todo creyente que ha recibido a Cristo como en su corazón como Señor y Salvador, está llamado a humillarse y exaltar a Jesús. Puede está respuesta de Juan: “Es necesario que el crezca pero que yo mengue”, parecer incomprensible en el mundo actual donde todos quieren sobresalir, donde nadie quiere estar por debajo de otro. La palabra menguar significa disminuir, venir a menos.
Jesús está demandando que lo atesoremos por encima de todos y de todo. Demanda que le amemos más que a todos, que le sigamos, le sirvamos, que confiemos, que le disfrutemos, que le obedezcamos primeramente a El.
Porque cuando Jesús crece en nosotros, crece el gozo. Cuando Jesús a través de los creyentes se vuelve mayor en el mundo, crece su amor, su paz, su bondad y su misericordia.
Debemos pedir al Señor que esta palabra de Juan se haga realidad en nuestras vidas, cuando le cedemos el total control a Jesús. Si yo quiero que Jesús esté en mi vida y este en toda su plenitud y poder, entonces tengo que menguar a todo lo que el Espíritu Santo me revele, negarme a tantas cosas que no me dejan avanzar al propósito eterno, y así permito que El pueda crecer en mi y a través de mí. Heb 12:2 “Despojaos de todo peso y del pecado que nos asedia.”
¿A qué debemos menguar? A la vida pasada que llevaba sin el Señor, no más mis deseos, sino los de El, ya no más mis pensamientos sino los de El, ya no más mis planes, sino los del Señor, que son mejores y perfectos. Gálatas 2:20 “Ya no vivo yo, más Cristo vive en mí.”
No es fácil para nuestro ego, negarnos a nosotros mismos, ni menguar, Jesucristo va a tomar el lugar que yo le permita. Nuestro anhelo es que El ocupe el primer lugar en nuestro corazón, si le damos todo el corazón, El lo va a tomar y va hacer una transformación en nuestras vidas.
En este segundo día de ayuno, digamosle «Gracias Amado Jesús por estar en mi corazón, quiero cederte el trono de mi vida, para vivir de acuerdo a tu voluntad, esto significa que tengo que dejar muchas cosas para poder menguar y permitir que tu crezcas en mi.»
